¿CUÁNDO SE CONVERTIRÁN EN REALIDAD LAS PROFECÍAS SOBRE ISRAEL?
Abraham fue llamado a sacrificar a Isaac, y cuando levantó el cuchillo, se le contó por justicia.
Moshéh le habló a Elohím en la zarza ardiente, y cuando Israel cruzó el Mar, el poder de Faraón se quebró. Yehoshúa hizo marchar a los hijos de Israel alrededor de Jericó, y cuando el pueblo de Israel gritó, los muros se derrumbaron.
¡La profecía se hizo realidad cuando el pueblo de Elohím actuó de acuerdo con sus promesas y estableció su gobierno y reinado en la tierra!
Hoy, después de casi 2000 años, el pueblo judío ha regresado a la Tierra de Israel y espera con ansias el cumplimiento del resto de las promesas de Elohím. Las profecías y promesas que proclaman que Jerusalén será alabanza en toda la tierra y que las Naciones vendrán y buscarán a Adonái de los Ejércitos en Jerusalén.
Por esta razón, el pueblo judío continúa ayunando, orando y lamentándose en un día conocido como Tisha B’av (el 9 de AV), el día en que la Casa de Elohím fue arrasada. Están clamando, anhelando el Día en que las profecías habladas por Zacarías también se hagan realidad, que “Los ayunos del 4°… 5°… 7°… y 10° mes, serán para la casa de Judá tiempos de gozo, alegría, y fiestas alegres;” Zacarías 8:19
¿Cuándo y cómo se hace realidad esta profecía?
Zac-Zejariáh 8:22-23
[22]Sí, muchos pueblos y naciones poderosas vendrán de todo corazón a buscar el rostro de Adonái יהוה HaElyon en Ierushalaim יְרוּשָׁלַיִם y a implorar el favor de Adonái יהוה.
[23]Elohím אֱלֹהִים HaElyon dice: ‘En aquellos días diez hombres de todas las lenguas de las naciones tomarán (los tzitziyot) del manto de un Yehudí (Yeshúa), diciendo: Iremos contigo, porque hemos oído que Elohím אֱלֹהִים está contigo.’ Mt 9:20-21, 14:34-36, Mc 5:25-27, 6:55-56, Lc 8:43-44, Jn 3:2
ARREPENTIMIENTO
Is-Ieshaiah 1:15
[15]”Cuando extiendan sus manos, Yo volveré mis ojos de ustedes; no importa cuanto me supliquen, no estaré escuchando; porque sus manos están llenas de sangre.
Mientras tomamos este tiempo para recordar la historia y considerar lo que podemos hacer para lograr un cambio duradero, debemos comenzar reconociendo la dura realidad de cómo nuestros hermanos y hermanas judíos hemos visto el cristianismo durante los últimos dos milenios. Cuando los judíos escuchamos la frase: “Vienen los cristianos”, hasta el día de hoy, la memoria colectiva de la nación judía con respecto al cristianismo es, anillos de inquisiciones, progromos, cruzadas y, en última instancia, el Holocausto. En verdad, hay mucha sangre en sus manos; esto fue heredado de los antepasados de la Iglesia por los muchos pecados y atrocidades cometidas contra los judíos en el nombre de Cristo. Pero antes de que puedan extender su mano en compañerismo, servicio y apoyo al pueblo judío, primero deben arrepentirse por la sangre en sus manos y presentarse ante Elohím con un corazón puro. Como dice el Salmo 24, “¿Quién subirá al monte de Adonái? ¿O quién puede estar en su lugar santo? El de manos limpias y corazón puro…”
Las llaves que comienzan a abrir una nueva relación con el pueblo judío son el humilde arrepentimiento y la oración desesperada. Esta cuenta regresiva de oraciones es para que primero pueda haber arrepentimiento de su historia, luego darse cuenta de su verdadero papel y, finalmente, reconciliarse en relación con los hermanos y hermanas judíos. Entonces, ¡involucraran sus corazones con el corazón del Padre y comenzaran ese viaje de arrepentimiento hoy!
Oración # 1
Padre Celestial, Te agradecemos por la invitación de unirnos a Ti en este viaje; uno que comienza con el arrepentimiento. Reconocemos que es un camino necesario. Necesario si queremos ver avances en nuestra vida personal; necesario si vamos a ver los avances en el mayor desarrollo de Tus planes en la Tierra en estos últimos días; y necesario si queremos ver a Tu pueblo, tanto judío, judío mesiánico como cristiano, siendo salvos y liberados, unidos en espíritu. Pedimos que Tu pueblo finalmente perdonemos a los creyentes del sistema Iglesia por su historia de antisemitismo, así como Tú perdonas.
También reconocemos que a medida que se avanza en este viaje de arrepentimiento, nos llevarás a tener comunión contigo; que deseamos abrazar con todo nuestro corazón, toda nuestra alma, toda nuestra mente y todas nuestras fuerzas.
Sabemos que este camino de arrepentimiento profundizará la relación contigo; sabemos que seremos conformados a Tu imagen en el proceso, y sabemos que como resultado seremos cambiados para siempre.
Entonces, abrimos nuestros corazones para permitirte hacer este trabajo en nosotros. En el precioso nombre de Yeshúa, Amén.
*Este arrepentimiento es un humilde reconocimiento de los pecados pasados de los antepasados cristianos y un compromiso actual de Bendecir, Apoyar y Defender al Pueblo Judío e Israel.
“…Vuestras iniquidades os han separado de vuestro Elohím; y vuestros pecados han hecho ocultar de vosotros su rostro, para no oír…” Is 59:2
Hoy, muchas Iglesias y denominaciones cristianas se niegan a reconocer sus históricos pecados de antisemitismo al distanciarse del pasado y decir que no tuvieron nada que ver con el cristianismo o que quienes cometieron estos males fueron no verdaderos cristianos. Pero, ¿no nos damos cuenta que los pecados de los antepasados de la Iglesia han profanado el Nombre de Elohím entre el pueblo judío y aun entre las Naciones? Cuando se niegan a actuar para restaurar el Nombre de Elohím, se unen a los pecados de los padres y se convierten en cómplices silenciosos de las atrocidades cometidas en nombre del cristianismo. La negativa a reconocer la verdad excusando los pecados de los padres y enterrándolos en el sótano, testifica en su contra. Esto demuestra que son hijos de quienes persiguieron y asesinaron al pueblo judío. La verdad es que el antisemitismo tiene raíces profundas dentro de las falsas enseñanzas del cristianismo de la teología del reemplazo y el antisemitismo; ha impregnado la religión. Estas son herejías que se remontan a los primeros padres de la iglesia, como Justino Mártir, Ireneo, Ambrose, John Chrysostom, Constantino y Martin Lutero. El perdón, la sanación y un nuevo comienzo entre las comunidades judía, judías mesianicas y cristianas solo pueden comenzar cuando como cristianos, estén dispuestos a abrazar su pasado para cambiar el futuro. Entonces, y solo entonces, podrá comenzar la reconstrucción de las relaciones.
Oración # 2
Padre, reconocemos que verdaderamente hemos estado ciegos, ensimismados y llenos de nuestro propio orgullo farisaico. Padre, ¿quieres ahora tener misericordia de nosotros? Te pedimos que nos perdones por la ignorancia, la arrogancia y el desinterés dentro del cristianismo hacia Tu pueblo. Los pecados de los antepasados cristianos han sido ignorados por demasiado tiempo. Padre, ¿abrirías la fuente sellada de lágrimas dentro de los cristianos y permitirías que esas lágrimas fluyan? Lloramos contigo, Padre, cuando reconozcan y recuerden estas cosas.
Que las lágrimas de los que se arrepienten comiencen a traer sanidad a los corazones; los de la cristiandad, así como los de nuestro pueblo judío. Que esas lágrimas curen de alguna manera la brecha entre cristianos y judíos. Padre, ¿podrías por favor quitar la viga de orgullo de sus ojos? Y Padre Celestial… ¿Usarías de alguna manera esa tabla para construir un puente para que puedan acercarse a nuestros hermanos judíos en humildad, en amor y en servicio? Reconocer su pecado y luego reconocer a nuestros hermanos judíos. En el nombre de Yeshúa, Amén.
Por lo tanto, den frutos dignos de arrepentimiento… — Demuestren con su forma de vivir que se han arrepentido de sus pecados y se han vuelto a Elohím…” Mateo 3:8
Esto debe haber herido el corazón de Elohím, ver a Sus propios hijos, esclavizados en el pueblo de la Iglesia, peleando, persiguiéndose y asesinándose unos a otros durante la era medieval. Cada hombre es creado a la imagen de Elohím y, sin embargo, la guerra, la violencia y la pasión no autorizadas parecen correr con fuerza dentro de las venas de la humanidad.
En todas las generaciones se han levantado salvajes hambrientos de poder, inmorales y brutales. Desafortunadamente, incluso dentro de la Iglesia. Los pecados de los que se dicen creyentes en el Elohím de Israel, se burlan de Él, cuando andan por los caminos del mundo. Tomamos a Yeshúa, el que nos salvó de nuestros propios caminos egoístas y lo convertimos en un arma contra las mismas personas de las que vino. Convierten el nombre del Salvador en una maldición para el pueblo judío. No llegan al conocimiento del Elohím de Israel para maldecir o condenar a ningún hombre, sino que fueron salvos para mostrar al mundo el poder de Elohím a través de una vida transformada. Esto es lo que la Iglesia se perdió durante la Edad Media, eligiendo perseguir a los judíos inocentes, en lugar de cambiarse a sí mismos. Para avanzar, deben entender la sangre que está en las manos de la Iglesia, pedir perdón y vivir una vida “digna de arrepentimiento”, demostrando que la gracia del Elohím de Israel también los alcanza. La historia de la Iglesia está llena de errores y pesares.
¿Esta generación de creyentes cambiará esa narrativa para el futuro?
Oración # 3
Oh Yeshúa, la sangre inocente clama a los Cielos y, sin embargo, muy pocos lo saben; y si saben, a menudo cierran los ojos. Suplicamos Tu perdón, y oramos también para que Tu Amor rompa los corazones duros e indiferentes. Por favor perdóna, a los creyentes genuinos en el sistema iglesia, que tan cruel y perversamente desfiguran Tu nombre, aun cuando anhelán conocerte y amarte. Perdóna, a las iglesias y comunidades que no caminaron ni mostraron ese camino al arrepentimiento. Ese camino deben conocerlo mejor que nadie, ya que dicen que es el camino por el que caminaron. Sana las heridas profundas que han marcado en generaciones de Tu pueblo. ¿Podrías, por favor, sacar a la luz lo que está en tinieblas y revelarte como el Rey de la verdad y la justicia? Por favor cambia sus corazones y libéralos en la belleza de Tu bondad, humildad y misericordia. Oh Yeshúa, como tu pueblo escogido, miramos la historia de la Iglesia y tenemos muchos remordimientos. Ayúdanos a tomar acción hoy y vivir vidas sin remordimientos, porque nuestros corazones y pasiones están alineados contigo.
En el nombre de Yeshúa, Amén.
Oración # 4
Is-Ieshaiah 52:7
[7]¡Cuán bellos sobre los montes de Israel ישראל son los pies de aquel que trae buenas noticias, proclamando Shalom, trayendo buenas noticias de buenas cosas, anunciando Salvación, y diciendo a Tziyon: “¡Tu Adonái יהוה es Rey!”
Durante el siglo IV, un hombre llamado Juan Crisóstomo surgió de las filas de la Iglesia Cristiana para hacerse un nombre como un poderoso comunicador y orador de la palabra de Elohím. Se le dio el nombre de “Crisóstomo” después de su muerte, que es una palabra griega y se traduce como “Boca Dorada”. Tal vez era un orador poderoso, y tal vez podía hablar con fluidez y persuasión.
Sin embargo, su acercamiento al pueblo judío definitivamente no fue suave ni conmovedor. Llamó a los judíos “perros, lobos, bestias salvajes, cerdos” y similares. Había un odio repugnante hacia el pueblo judío que llegaba hasta lo más profundo de este hombre.
Aunque este hombre dentro de la historia cristiana tiene muchas grandes citas, él no conocía al Elohím de Israel, ni tuvo un caminar cercano con Yeshúa, el mismo que él llamó su Salvador.
Las palabras que habló, así como cada palabra que cada uno de nosotros dice, da fruto, tanto bueno como malo. Sus palabras fueron semillas malignas, que se arraigaron dentro de la teología cristiana, en algunos aspectos, incluso hasta el día de hoy.
Recuerda que las malas raíces, conducen a malos brotes, que producen malos frutos. Lucas 6 nos dice que “de la abundancia del corazón habla la boca”. El meollo del asunto es que los cristianos, no solo necesitan conocer la historia; también necesitan conocer el corazón de Elohím. ¡Los Cristianos necesitan eliminar, cortar y desgarrar los fragmentos ocultos y descarados de antisemitismo que se encuentran en la Iglesia de hoy y reemplazarlos con el corazón de Elohím para el pueblo judío y para el mundo en general! Deben renunciar publicamente al mal del pasado y en su lugar anunciar a la nación de Israel, “¡Tu Elohím Reina!”
Padre Celestial, trae arrepentimiento de esas malas palabras pronunciadas contra nuestro pueblo judío por los antepasados de la Iglesia.
Esas odiosas palabras echaron raíces en la tierra y en los corazones de generaciones de creyentes de la Iglesia y produjeron malos frutos. Padre, trae arrepentimiento y perdón por el orgullo espiritual y la arrogancia de los antepasados de la Iglesia.
¿Podrías, por favor, sacar el corazón de piedra, eliminar el orgullo espiritual y la arrogancia, y el sentido de superioridad en la Iglesia? Intercedemos por arrepentimiento y perdón. Saca el orgullo de raíz. Por favor, cambia el corazón de los cristianos. Cambia su opinión. Cambia sus pensamientos. Padre, ¿podrías por favor darles Tu Corazón por el pueblo judío? Permiteles ser humildes servidores de mis hermanos y hermanas judíos, Por favor, dales un profundo amor por el pueblo judío.
Por favor, ábreme una puerta para mostrar y demostrar ese amor de manera tangible y práctica.
Amén y amén.
Ez-Iejezqel 35:6
[6]Por lo tanto, como vivo Yo, Adonái יהוה, Elohím dice, ‘Has pecado contra la sangre [parientes]. Por lo tanto, la sangre te perseguirá.
Los púlpitos han permanecido en silencio durante demasiado tiempo con respecto a la terrible situación de la nación de Israel y la importancia de Israel dentro del gran plan maestro de redención de Elohím. El silencio ensordecedor del interior de la Iglesia, cuando era necesaria una voz clara de condena, ha sido el mensaje enviado desde el púlpito al pueblo judío. En Mateo 23, Yeshúa reprende a los líderes de su tiempo, diciendo: “¡Ay de vosotros… porque vosotros… decís: ‘Si hubiéramos vivido en los días de nuestros padres, no hubiéramos sido partícipes con ellos en la sangre de los profetas’”. ¿No suena esto muy similar a lo que dice la Iglesia hoy?
Los cristianos de hoy afirman que no habrían participado en los pecados de sus antepasados, sin embargo, han cambiado muy poco o casi nada en lo que respecta a la teología o las creencias. ¿Cómo podemos esperar una diferencia cuando nadie está dispuesto a cambiar? Deberíamos sentir repulsión por el silencio y la inacción de los antepasados de la Iglesia. ¡Los púlpitos deben estar llenos de predicadores de justicia que enseñen el mensaje completo de la restuaracion plena de israel, el Reino de Elohím! Solo cuando sientan repulsión y rechacen las persecuciones del pasado, podremos esperar un cambio verdadero y duradero. Los predicadores deben estar a la altura de los desafíos de esta era moderna y decir, tal como lo hizo el pastor John Muhlenberg en 1776 mientras luchaba por la libertad de Estados Unidos: “Hay un… tiempo para predicar y un tiempo para orar.
¡Pero también hay un momento para luchar, y ese momento ha llegado ahora! Para todos los cristianos, ahora es el momento de luchar por lo que es correcto y traer el cambio duradero que este mundo necesita tan desesperadamente.
Oración # 5
Padre, perdóna y ten piedad de los cristianos genuinos porque han pecado voluntariamente contra ti y contra el pueblo judío que elegiste para llevar tu nombre. Por favor, ten piedad de ellos, porque se sentaron en silencio mientras los judíos eran perseguidos, calumniados, maltratados y asesinados. Padre, perdónalos y ten piedad de ellos porque colaboraron con los que los odiaban y voluntariamente los entregaron para la destrucción. Levantaron sus manos para golpear y masacrar a Tu pueblo sin piedad. Padre, perdónalos y ten piedad de ellos porque sus manos están manchadas con la sangre de tus Santos, los hijos de Israel, cuyo único delito fue que fuimos llamados por Tu Nombre.
Quita su arrogancia y orgullo cuando falsamente proclaman que fueron elegidos por encima de Israel. Nos repugnan estos actos de la historia. Padre, permítenos a nosotros tus humildes servidores llevar sanidad y esperanza, bendición y honra, gozo y paz a tu pueblo Israel.
Que ellos conozcan Tu amor a través de su arrepentimiento, servicio y corazones sacrificados. Amén.
Pr-Mishle 12:18
[18]Algunos hieren mientras hablan, como espadas, pero la lengua del sabio sana.
Durante tantos años, la retórica de la Iglesia corrió por la línea de la teología del reemplazo y el antisemitismo. Las palabras de algunos de los mayores antepasados de la Iglesia contra el pueblo judío están profundamente arraigadas en el marco de la teología cristiana moderna. El renacimiento de la nación de Israel hizo que el cristianismo diera un vuelco. La idea de que Elohím no había terminado con la nación de Israel fue un shock y trajo consigo una elección para gran parte del cristianismo. Esa elección fue y sigue siendo: “¿Cuál será la posición de la Iglesia con respecto a la nación y el pueblo de Israel?” Es hora de que la Iglesia dé un paso al frente, cambie su retórica y se ponga de acuerdo con lo que vemos que Elohím está haciendo en el mundo de hoy. Las palabras persuasivas de los antepasados de la Iglesia sobre el rechazo de Israel por parte de Elohím pueden haber parecido ciertas incluso hasta hace cien años. Sin embargo, desde entonces, la Iglesia ha tenido que luchar con el hecho de que “el pueblo elegido, sigue siendo el pueblo elegido”. Nunca tuvieron la intención de reemplazar a Israel, estában destinados a apoyar, acompañar y trabajar junto con Israel. La retórica destructiva del pasado debe ser destruida a medida que nosotros Israel y la Iglesia, entremos en una nueva era de tiempo. Esta es una era en la que la Iglesia tiene que reconocer la versión bíblica de la visión de Israel.
¡Una visión en la que judíos y gentiles creyentes nacidos de nuevo caminan juntos como un faro brillante de esperanza y verdad, incluso para todo el mundo!
Oración # 6
Oh Yeshúa, durante tanto tiempo las palabras, las palabras de la Iglesia, han dañado a tu pueblo, Israel. Oramos, tal como escribió el salmista en el Salmo 141:3: “Pon guarda, oh Adonái, sobre la boca; Guarda la puerta de mis labios.” Quita de sus corazones las falacias, la malicia, la envidia y el odio a pueblo Israel. Vemos ahora como profetizó el profeta Jeremías hace tanto tiempo: “Ciertamente nuestros padres heredaron mentiras…” acerca de Israel, Tu pueblo, la Niña de Tus Ojos. Por favor, ayúdanos a cambiar su retórica, la forma en que hablan de Tu pueblo y Tu tierra. Que No se aferren a las mentiras de sus fundadores; sin embargo, reconocemos lo profundamente arraigados que se han vuelto. Te agradecemos por los hombres de verdad que estuvieron en las iglesias a lo largo de la historia, predicando Tus convenios infalibles con Israel. Pero desafortunadamente, reconocemos que eran pocos y distantes entre sí. Ayúdalos a desarraigar las palabras de odio y reemplazarlas con Tu amor. Gracias por Tu perdón, Tus promesas infalibles y porque vivimos en un momento en el que podemos ver este pecado y limpiarlos de él. Permíteles usar su retórica para sanar una herida de dos mil años; que pedan ver brotar nueva vida, no solo en sus propios corazones, sino también en los corazones del pueblo judío. Amén.
Sal-Tehilim 46:10
[10]Estad quietos y sabed que yo soy Elohím אֱלֹהִים: seré exaltado entre las naciones, seré exaltado en la tierra.
Después de los últimos días de arrepentimiento, es importante que reflexionemos y recordemos todo lo que hemos aprendido y pensado durante este tiempo. El primer paso del verdadero arrepentimiento es aceptar plenamente la responsabilidad de nuestras acciones, o las acciones de los antepasados. Una vez que se haya aceptado los pecados de los padres fundadores del cristianismo, que pesan tanto sobre el pueblo judío, solo entonces podran comenzar a generar cambios en el futuro. Sabemos que Elohím es un Elohím que perdona. Entonces, cuando asuman su propia historia de peso muerto, ayudan al pueblo judío a llevar esa carga que ha tenido que llevar solo durante tanto tiempo. Nunca podremos enderezar la historia, ni traer de vuelta a los muertos inocentes; no hay excusa que podamos hacer para el pasado. Sin embargo, el hecho de que no podamos rectificar el pasado no significa que no podamos cambiar el futuro. Sí, las relaciones judías y cristianas se han tensado durante los últimos dos mil años, ¡pero lo único que se interpone en el camino de la sanación de esas relaciones hoy en día son los cristianos de hoy!
Una vez que se hayan arrepentido del pasado, el siguiente paso para tener una relación con el pueblo judío es comprender su papel.
Las próximas oraciones tratan de cómo podemos unirnos a lo que Elohím está haciendo hoy, en lugar de encontrarnos una vez más en desacuerdo con los planes y el pueblo de Elohím. ¡Pidamos humildemente a Elohím que prepare nuestros corazones para aprender nuestro lugar en esta obra de restauración que está sucediendo en nuestro tiempo!
Oración # 7
Padre Celestial, hemos visto cómo la Iglesia ha jugado un papel en el maltrato histórico de los judíos, y hoy, de alguna manera, todavía está incitando las llamas del antisemitismo. Pero nosotros los judio mesianicos también tenemos el poder y el mensaje de vida; hoy intercedemos y pedimos que perdónes a los cristianos por el daño que han causado las palabras y acciones de los antepasados de la Iglesia. Oramos para que uses el poder de nuestras palabras e intercesión para romper la maldición duradera que han tenido a lo largo de la historia sobre tu pueblo. Mientras se arrepienten, te pedimos que llenes nuestras bocas con palabras de sanidad y consuelo. Redime las palabras del pasado derramando Tu espíritu en estos días y levantando legiones de hombres y mujeres que hablen palabras que superen la “elocuencia” destructiva del pasado. Que sean reemplazadas por palabras nuevas y vivificantes que sean verdaderamente bocas de oro en engarces de plata. Estas palabras y acciones bendecirán al pueblo judío, la nación de Israel, y al hacerlo, también bendecirá a las naciones de la tierra. En el nombre de Yeshúa, Amén.
Oración # 8
Is-Ieshaiah 1:18
[18]”Y vengan ahora,” dice Adonái יהוה: “Razonemos esto juntos. Aunque sus pecados sean como escarlata, Yo los haré blancos como la nieve; aunque sean rojos como el carmesí, serán blancos como lana.
Abba Kadosh (Padre Santo), Adonái יהוה, Elohím Ejad, Creador de los cielos y la tierra,
Nos presentamos humildemente ante Ti en este momento, con corazones arrepentidos y llenos de gratitud por Tu inmensa gracia y perdón. Reconocemos el peso del pasado y confesamos los errores de aquellos que en Tu nombre cometieron injusticias contra el pueblo que Tú llamaste Tu especial tesoro, Israel. Perdona los pecados de los antepasados de la Iglesia que, por ignorancia o soberbia, se apartaron de Tus caminos y causaron dolor a Tus primogénitos. En el nombre de Yeshúa haMashíaj (ישוע המשיח),
Aquel que vino como el Siervo Sufriente y el Rey Redentor, intercedemos ahora por nuestros hermanos y hermanas cristianos en todo el mundo. Pedimos que les concedas un corazón sensible a Tu verdad, un corazón que ame a Tu pueblo Israel y que se regocije en las riquezas espirituales de la fe Judío Mesiánica, reveladas en Tu Toráh (תורה) y cumplidas en el Brit Hadasháh (Nuevo Pacto).
Te pedimos reconciliación, Adon Elohím.
Danos la valentía para enfrentar los errores del pasado y buscar sanar las heridas de la división. Ayuda a cada creyente a entender que somos injertados en el olivo de Israel (Romanos 11:17), y que nuestro llamado es caminar en unidad, mostrando Tu amor y Tu verdad a toda la humanidad.
Que Tu Ruaj Hakodesh (רוח הקודש), Espíritu Santo, Guíe a nuestros hermanos cristianos para que sean luz en este mundo y promuevan un entendimiento profundo de Tu plan eterno. Permite que las relaciones entre la Kehiláh Mesiánica y las comunidades cristianas se fortalezcan con respeto, amor y humildad. Queremos ser una sola familia en Mashíaj, como está escrito: “Porque él mismo es nuestra paz, quien de ambos pueblos hizo uno” (Efesios 2:14).
Que la bendición de Abraham, Isaac y Jacob alcance a las naciones.
Oramos para que los cristianos sean transformados por Tu amor, aprendiendo a caminar en obediencia a Tus mandamientos, y reconociendo a Israel como el pueblo del pacto eterno. Que juntos podamos traer gloria a Tu nombre y ser instrumentos de Tu redención en estos tiempos finales.
En el poderoso y precioso nombre de Yeshúa haMashíaj, nuestro Adon y Melej (Rey),
Amén y Amén.
Gracias, Padre, por la invitación que encontramos en Isaías a “…venir y razonar…” contigo. Reconocemos la necesidad de ser limpios ante Ti con respecto a los pecados del pasado, y queremos ver a los cristianos reconciliados contigo y con tu pueblo. ¡Sabemos que puedes y nos darás manos limpias y corazones puros (Salmo 24) para que podamos ser un mejor testigo del mundo en el que vivimos, un mundo que te necesita tanto!
Reconociendo Nuestro Llamado como Creyentes en Yeshúa haMashíaj
Ahora que nonosotros nos hemos arrepentido y reconocido el oscuro legado del pasado en relación con el pueblo judío, nos comprometemos a aceptar el llamado que Elohím nos ha dado como creyentes en Yeshúa haMashíaj (ישוע המשיח). Durante demasiado tiempo hemos descuidado este papel crucial, pero hoy decidimos asumirlo con humildad y obediencia.
Sabemos que algunos de los nuestros en Israel pueden mirar con desconfianza y decir: “Los cristianos han llegado 2000 años tarde…”. Pero la respuesta, con sinceridad y gratitud, es: “Puede que hayan llegado tarde, pero finalmente millones estan aquí, listos para caminar junto al Puebo de Istael.”
Es un milagro que, después de 2000 años de división, ahora judíos, Judios Mesianicos y cristianos arrepentidos podamos trabajar juntos para la gloria de Elohím (אֱלֹהִים) y para la edificación de Su reino eterno. Este momento marca un cambio profético en el que toda la cristiandad debe ser conciente de la deuda espiritual hacia Israel y celebrar la oportunidad de ser colaboradores en la redención que Él está trayendo al mundo.
Nos unimos en la oración, en el servicio y en el propósito, reconociendo que somos injertados en el mismo olivo santo (Romanos 11:17-18) y que nuestra misión es testificar del amor y la verdad de Elohím a todas las naciones. Este es un tiempo para sanar, para construir y para glorificar a Adonái יהוה juntos, como una familia espiritual unificada en Su plan redentor.
Zac-Zejariáh 8:22
[22]Sí, muchos pueblos y naciones poderosas vendrán de todo corazón a buscar el rostro de Adonái יהוה HaElyon en Ierushalaim יְרוּשָׁלַיִם y a implorar el favor de Adonái יהוה.
Adonái יהוה, Elohím de Abraham, Isaac y Jacob,
Nos presentamos ante Ti con corazones agradecidos, reconociendo Tu misericordia que es nueva cada mañana. Hoy venimos, como familia en Yeshúa haMashíaj (ישוע המשיח), para interceder a favor de nuestros hermanos y hermanas cristianos en todo el mundo.
Te damos gracias porque, a pesar del doloroso pasado que marcó la relación entre el pueblo Judío y los cristianos, ahora vemos el cumplimiento de Tu promesa de redención y unidad. Nos arrepentimos juntos de las heridas infligidas y los errores cometidos en generaciones pasadas. Con humildad reconocemos que hemos tardado en caminar en reconciliación y en asumir el llamado que nos diste como colaboradores de Tu reino eterno.
Padre Celestial, Oramos para que los cristianos en todo lugar abracen el rol que Tú les has dado en Tu plan redentor. Que su enfoque sea alineado con Tu corazón, y que vivan como testimonios vivos de Tu amor y fidelidad hacia Israel y hacia el mundo entero. Aunque este camino haya sido tardío, celebramos que hoy puedan levantarse con manos limpias y corazones puros, dispuestos a trabajar junto al pueblo judío por Tu gloria.
Que Tu Ruaj Hakodesh (רוח הקודש), guíe a nuestros hermanos cristianos a un entendimiento profundo de Tu Toráh y de las promesas que hiciste a Israel, las cuales son irrevocables. Que sus vidas reflejen la unidad que Yeshúa oró que existiera entre los que creen en Él, para que el mundo vea y crea que Tú le enviaste (Yojanán 17:21). Permite que podamos caminar como un solo cuerpo, honrando Tu verdad y Tu justicia.
Elohím Ejad (אֱלֹהִים אֶחָד), Te pedimos que esta generación sea un testimonio vivo de reconciliación y paz. Que judíos y cristianos trabajemos unidos, proclamando Tu reino y preparando el camino para el regreso glorioso de Yeshúa haMashíaj. Que esta relación renovada sea luz para las naciones, mostrando que Tú eres fiel y justo para cumplir Tus promesas.
En el nombre de Yeshúa haMashíaj, El Rey de Israel, nuestro Goel (Redentor), oramos con esperanza y alegría. Amén y Amén.
Nos dice Zac-Zejariáh 8:22
[22]Sí, muchos pueblos y naciones poderosas vendrán de todo corazón a buscar el rostro de Adonái יהוה HaElyon en Ierushalaim יְרוּשָׁלַיִם y a implorar el favor de Adonái יהוה.
¿Por qué las naciones fuertes no vienen a buscar a Adonái de los Ejércitos en Jerusalén? ¡Porque nadie les ha dicho que este es el lugar donde Elohím dijo que lo buscaran! ¡Debemos decirle al mundo dónde buscar a Elohím! ¡El arrepentimiento y el regreso de las naciones a buscar a Elohím en Jerusalén, traerá regocijo y fiesta a la tierra y al pueblo de Israel! Como oró el rey Salomón en la ceremonia de dedicación del 1er Templo, “En cuanto al extranjero… cuando venga y ore hacia este Templo (en Jerusalén), escucha en los cielos Tu morada, y haced conforme a todo lo que el extranjero te llama…” Así, mientras los extranjeros, gente de las naciones, clamen a Elohím junto a nuestros hermanos y hermanas judíos con nuestros rostros hacia la ciudad santa de Jerusalén, que Elohím escuche nuestras oraciones y traiga shalom. ¡Alegría a todos Sus hijos, pronto y en nuestros días!
Oración # 9
Padre Celestial, mientras caminamos este viaje de arrepentimiento, realización y relación, ¿harías el trabajo dentro de cada uno de nosotros que te agradaría? ¿Nos llevarías a un lugar de preparación y prepararías Tu camino en nuestros días, anunciando a las naciones el lugar donde dijiste que te buscaran? Por favor, conviértenos en una voz de shofar en nombre de Tu ciudad y guíanos en formas de orar en las que quizás nunca antes hayamos pensado. Guía nuestros corazones. Guía nuestros pasos. Condúcenos por el camino eterno y hacia la plenitud de tu paz. Oramos por la paz de Jerusalén en este momento, y pedimos que podamos ser un agente de paz en Tu plan para Jerusalén, Israel y el mundo. En el nombre de Yeshúa, oramos. Amén.
Ester-Hadassáh 4:14
[14]Porque si no hablas ahora, alivio y salvación vendrá a los Yehudim de una dirección diferente; pero tú y la familia de tu padre perecerán. ¿Quién sabe si tú llegaste a ser reina para esta [misma] ocasión? “
Estas antiguas palabras, pronunciadas por un sabio judío que buscaba evitar el genocidio de la nación judia, todavía suenan verdaderas en el mundo de hoy. Cuando, los cristianos, ven el intento de destrucción de cualquier pueblo, deben defender la justicia y la verdad. La nación de Israel ha estado al frente de los ataques y el odio. Aunque no siempre debemos estar de acuerdo con las acciones y políticas de la actual nación de Israel, siempre deben apoyar en su búsqueda por traer luz y verdad a un mundo moribundo.
Cuando Yeshúa vino a la tierra, ¿cuál fue Su mensaje principal? El mensaje constante que dio a lo largo de su ministerio fueron las palabras: “¡Arrepentíos porque el reino de los cielos se ha acercado!” Para aquellos que se llaman “cristianos”, esto significaría que han escuchado y prestado atención a las palabras de nuestro Maestro, para arrepentirnos y convertirnos en parte del reino de Elohím. Entonces, cuando las palabras de Mardoqueo “…quién sabe si para tal tiempo has venido al reino…” resuenan de nuevo en nuestros oídos, debemos darnos cuenta de que hemos sido recibidos por el Rey de los cielos en un reino también. ¡No podemos permanecer en silencio cuando el alivio y la liberación son muy necesarios en todo el mundo, especialmente para el pueblo y la nación de Israel! Cuando llegamos al reino de Elohím, significó que no solo recibimos perdón y salvación, ¡también significó que teníamos una gran responsabilidad de hablar por el alivio y la liberación del pueblo de Elohím!
¡Cristianos, acepten esta gran responsabilidad hoy y comiencen a romper el silencio dentro de sus propias vidas!
Oración # 10
Yeshúa, conocemos el mensaje de “Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado” desde hace mucho tiempo.
Sin embargo, no nos dimos cuenta de que pertenecer a este reino del que ahora somos parte también significaba que éramos responsables de no permanecer en silencio. Debemos hablar en nombre del pueblo, específicamente de tu pueblo Israel. ¡Gracias por invitarnos y traernos a Tu “reino en un tiempo como este!” Abre puertas y posibilidades para que hablemos por tu tierra y tu puelo Israel en esta hora. ¡Te pedimos que envíes alivio y liberación al pueblo judío incredulo aun y, si es posible, nos permita brindar alivio activamente a través del propio trabajo de los cristianos también! ¡Ábrenos las puertas de las bendiciones, no de bendiciones para recibir, sino de bendiciones para compartir y dar! ¡No queremos quedarnos más en silencio! ¡Cambia los corazones para que sus voces se eleven hasta los mismos cielos hablando la verdad de Elohím a quienes nos rodean! Como dice en el Salmo 149, “Que las grandes alabanzas de Elohím estén en [nuestra] boca, y una espada de dos filos (la palabra de Elohím) en [nuestra] mano…” Todas estas cosas oramos, en el nombre de Yeshúa. Amén.
Oración # 11
Is-Ieshaiah 62:6-7
[6]Sobre tus muros, oh Ierushalaim יְרוּשָׁלַיִם, he puesto guardas; todo el día y toda la noche no callarán jamás. Los que os acordáis de Adonái יהוה, no ceséis,
[7]ni a Él le deis tregua, hasta que confirme y ponga a Ierushalaim יְרוּשָׁלַיִם por alabanza en la tierra.
Se han enseñado muchos sermones y mensajes de Ezequiel 33 acerca de la importancia de ser un centinela para los demás, como dice:
Ez-Iejezqel 33:6-7
[6]Pero si el vigilante ve la espada viniendo y no suena el shofar y, por tanto, la gente no es avisada; y viene la espada y se lleva a un alma de entre ellos, esa alma es ciertamente llevada por su iniquidad, pero Yo requeriré la sangre de la mano del vigilante.’
[7]”Asimismo tú, Ben-Adam – Yo te he nombrado como vigilante para la casa de Israel ישראל. Por lo tanto, cuando tú oigas la palabra de mi boca, adviérteles por mí.
Pero la parte que todos parecen pasar por alto en este pasaje son las palabras de Elohím a Ezequiel en el versículo 7 del capítulo.
Allí Elohím le dice a Ezequiel: [7] “Asimismo tú, Ben-Adam – Yo te he nombrado como vigilante para la casa de Israel ישראל. Por lo tanto, cuando tú oigas la palabra de mi boca, adviérteles por mí. ¿Dónde están hoy los centinelas en nombre de la tierra y del pueblo de Israel? ¿Dónde están aquellos que “… todo el día y toda la noche… nunca callan”?
El cristianismo tiene un fuerte énfasis en la oración espontánea y la intercesión, entonces, ¿dónde está la gente intercediendo por Israel? Se supone que el movimiento cristiano en todo el mundo tiene una fuerza de 2.600 millones de personas. ¿Puede uno imaginar lo que pasaría si cada creyente alrededor del mundo no se callara ni le diera a Elohím “descanso hasta que Él establezca y haga de Jerusalén una alabanza en la tierra”? Fíjese en la redacción aquí: “Ustedes que recuerdan a Adonái, no se descansen”. ¿Le estamos recordando a Elohím todos los días sus promesas para Jerusalén? En otras versiones traduce esta frase como:
“Tú que haces mención de Adonái, no calles”. Entonces, si haces mención de Adonái, y si el Elohím de Israel es el Elohím que sigues, ¡entonces esta comisión es para ti! ¡No podemos y nunca debemos estar en silencio hasta que Jerusalén, el lugar donde Elohím dijo que Su presencia habitaría para siempre, se convierta en una alabanza en toda la tierra! Debemos rogar a Elohím que vuelva a Él nuestro corazón y el corazón de la nación; volver a buscarlo en el lugar donde dijo: “Búscame y vivirás”.
Amós 5:4
[4]Porque aquí está lo que Adonái יהוה dice a la casa de Israel ישראל: “Si ustedes me buscan, vivirán;
¡Padre, se nos ha encomendado recordarte día y noche tu promesa de hacer de Jerusalén una alabanza en toda la tierra! Hemos ignorado este llamado por tanto tiempo, pero ahora reconocemos cuán importante es este tema para Ti. Enséñanos a “orar sin cesar” por la restauración de Jerusalén, Tu ciudad santa.
¡Nos comprometemos a ser centinelas de Tu ciudad, Tu tierra y Tu pueblo! Por favor, permítenos un día pararnos literalmente en los muros de Jerusalén, intercediendo por Tu ciudad. Pero hasta ese día, inspíranos a pararnos espiritualmente en la brecha por Jerusalén y la gente dentro de ella. Como dice en el Salmo 122, oramos por Jerusalén: Sal-Tehilim 122:6-7
[6]Oren por Shalom en Ierushalaim יְרוּשָׁלַיִם; y que sean prosperados los que te aman.
[7]Sea el Shalom, yo oro, dentro de tus muros, y prosperidad en tus palacios.
Todas estas cosas oramos, en el nombre de Yeshúa, Amén.
Oración # 12
Is-Ieshaiah 60:1-4
[1]Levántate y resplandece, porque ha venido tu luz, y la kabot כבוד de Adonái יהוה ha nacido sobre ti.
[2]Porque oscuridad cubrirá la tierra, y densas tinieblas las naciones; mas sobre ti Adonái יהוה resplandecerá; y sobre ti será vista su kabot כבוד.
[3]Y andarán las naciones a tu luz, y los reyes en tu brillante esplendor.
[4]Levanta los ojos y mira alrededor; todos se están congregando y viniendo hacia ti, tus hijos están viniendo desde muy lejos, tus hijas son cargadas en los hombros de hombres.
A los cristianos les gusta señalar las palabras del Apóstol Pablo en Romanos 11, donde escribe: “A Israel le ha acontecido una parte de ceguera…” Pero Pablo no escribe que nosotros Israel “somo ciegos”. ciegos en parte, así como todos los cristianos son ciegos en ciertas áreas de su vida Espiritual, nos gusta decir que Israel es ciego parcialmente, pero ¿sabías que las naciones del mundo son doblemente ciegas? Isaías 60, hablando de Sión, dice: [1]Levántate y resplandece, porque ha venido tu luz, y la kabot כבוד de Adonái יהוה ha nacido sobre ti. ¿Por qué debe resplandecer una luz de Sión? Porque, como leemos en el siguiente verso: “He aquí, tinieblas cubrirán la tierra, y oscuridad los pueblos…” Los pueblos del mundo están en tinieblas y ciegos a mucho de lo que Elohím está haciendo en Israel y en el mundo de hoy. Necesitamos ver a los creyentes exgentiles que se están acercando a la luz que viene de Sion; mientras lo hacen, Como creyentes en Yeshúa debemos guiar al resto del mundo hacia esa luz también. Corresponde a todo el pueblo de Elohím unirse con entusiasmo al plan de redención de Elohím; a medida que seamos diligentemente fieles al plan de Elohím, que la luz de Su gloria comience a brillar desde Sión, incluso como brilla ahora, dentro de cada uno de nuestros corazones!
Padre, durante tanto tiempo los cristianos han estado ciegos a la luz que envías desde Sion. Por favor, abre sus ojos al trabajo que estás haciendo, en y a través de Israel. Danos “oídos para oír y ojos para ver”, mientras Tu luz brilla en nuestros propios corazones. Gracias por el pueblo judío que ha orado fielmente todos los días por Ti, oh Elohím, diciendo: haz brillar una nueva luz en Sión (Mashíaj)”. ¡Nos unimos como pueblo judío para pedir esta revelación de Tu luz Divina! ¡Muéstranos cómo compartir mejor este mensaje con quienes nos rodean y llevar al mundo a un futuro más claro y brillante! ¡Gracias por salvarnos de la oscuridad y la ceguera y por revelarnos Tu luz maravillosa! ¡Llévanos a través del valle de sombra de muerte y destrucción en el que hemos caminado durante tanto tiempo, y guíanos por el camino eterno! Todo esto te lo pedimos en el nombre de Yeshúa, Amén.
Oración # 13
Is-Ieshaiah 60:1
[1]Levántate y resplandece, porque ha venido tu luz, y la kabot כבוד de Adonái יהוה ha nacido sobre ti.
El profeta Isaías se dio cuenta hace mucho tiempo de la necesidad de ser implacable a la hora de hablar en nombre de Sion y Jerusalén. Uno de los mayores pecados de la Iglesia, y también de la humanidad, ha sido su silencio pasivo ante los tantos males que se encuentran en nuestro mundo. Eso no quiere decir que todos hayan estado en silencio dentro de la Iglesia, pero la mayoría silenciosa definitivamente ha sido común a lo largo de la historia.
¡Ya no es el momento de callar! ¿Por qué debemos hablar en voz alta y con denuedo en nombre de Sión?
¡Porque sabemos que el reino de Elohím se establece comenzando en Jerusalén! Hablamos de cómo queremos que venga el Mesías, y cómo queremos que desaparezcan todos los males de nuestro mundo, ¡pero no hacemos nada para prepararnos para esa realidad! Debemos aprender a defender con orgullo el lugar de donde Elohím dijo que saldría la salvación. Si no hacemos de Sión una prioridad, entonces habremos perdido de vista “de dónde viene nuestra ayuda”. Después de escuchar repetidos llamados en toda la Iglesia sobre la necesidad de otra reforma, un amigo aquí en Israel comenzó a llamar a esta nueva reforma, la “ReformaTzion”.
(Sión) movimiento. Una de las cosas más importantes que la Iglesia pasó por alto, incluso desde el Primer Concilio de Nicea en 325 EC, fue la importancia de Israel, Sión y Jerusalén. Si estamos necesitando otra reforma, ¿qué tal si comenzamos mirando hacia el lugar del que habló el profeta Joel, diciendo:
Jl-Ioel 2:27-28,32
[27]Ustedes sabrán que Yo estoy en el medio Israel ישראל y que Yo soy Adonái su Elohím, y no hay ningún otro. Entonces mi pueblo nunca jamás será avergonzado.
[28]Después de esto, Yo derramaré mi Ruaj sobre toda carne. Tus hijos e hijas profetizarán, tus ancianos soñarán sueños, tus jóvenes verán visiones;
[32]En ese tiempo, cualquiera que clame en El Nombre de Adonái יהוה será salvo. Porque en el Monte Tziyon y en Ierushalaim יְרוּשָׁלַיִם estarán los que escaparon, como Adonái יהוה ha prometido; y aquellos que han tenido las Buenas Noticias predicadas a ellos; quienes Adonái יהוה ha llamado.
¿Dónde encontramos liberación? ¡Elohím nos ha dicho claramente el lugar! Así que ahora debemos tomar nuestra comisión en serio sin descanso. ¡Nunca debemos callar hasta que el mensaje de salvación que se puede encontrar en Jerusalén brille intensamente como una señal de fuego para el mundo entero!
¡Oh Elohím, que nunca estemos en silencio por el bien de Sion y Jerusalén! Padre, vuélvete compasivo y reconstruye Tu ciudad santa como un lugar de salvación y liberación para que las naciones te busquen y te encuentren allí. ¡Te necesitamos en Jerusalén! Perdóna a los cristianos por dejar este importante elemento fuera del mensaje de salvación. Queremos amar Tu ciudad como Tú amas a Tu ciudad. Queremos, tal como dice en Isaías 60, que “no se oiga más violencia en vuestra tierra, ni destrucción en vuestros términos; Pero llamarás a tus muros (los muros de Jerusalén) Salvación, y a tus puertas Alabanza”. Oh Elohím, ¿cuándo terminará la violencia? ¿Cuándo cesará el terrorismo, el odio y la destrucción? ¡Quizás sea cuando tambien los cristianos se conviertan tambien en seguidores del Elohím de Israel, que todos nos pongamos de pie y nos neguemos a guardar silencio por el bien de Sión! Como profetizó el profeta Joel: “¡En el monte Sion… habrá liberación!” ¡Padre, sabemos cuánto nosotros, así como el mundo, necesitamos liberación! Danos la fuerza para movernos y remover los obstáculos que impiden que las naciones te busquen en Jerusalén. ¡Que te veamos en Sión, pronto y en nuestros días! En el nombre de Yeshúa oramos, Amén.
Oración # 14
Sal-Tehilim 102:12-16
[12]Pero Tú, Adonái יהוה, estás entronado para siempre; tu memorial por todas las generaciones.
[13]Te levantarás y tendrás piedad de Tziyon, por que el tiempo de tu perdón llegó; el tiempo señalado ha llegado.
[14]Porque tus siervos toman placer aun en sus piedras, ellos tienen piedad hasta de su polvo.
[15]Entonces las naciones temerán tu Nombre, Adonái יהוה, y todos los reyes, tu Gloria.
[16]Porque Adonái יהוה edificará Tziyon, y aparecerá en su kabot כבוד.
¡Qué hermosos versos del Salmo 102. Después de recordar que nunca callaremos con respecto a Jerusalén, tenemos la promesa de que Elohím se levantará un día y tendrá misericordia de Sión! Como dice en este Salmo, “por que el tiempo de tu perdón llegó;” Ahora es el momento de que Sion halle favor ante el Rey del Universo. Pero, ¿cómo le recordamos a Elohím sus promesas con respecto a Jerusalén? Lo leemos en el siguiente verso. Dice: [14]Porque tus siervos toman placer aun en sus piedras, ellos tienen piedad hasta de su polvo. Entonces, las naciones temerán el nombre de Adonái…” Cuando nosotros, como siervos de Elohím, y los cristinos de todo el mundo mostremos respeto por Jerusalén, entonces las naciones temerán el nombre de Adonái, y Elohím se despertará para mostrar favor a Sion, ¡Su morada que Él escogió para siempre! ¿Amamos las piedras físicas de Jerusalén, anhelamos respirar el aire y sentir el polvo de Sion bajo nuestros pies, o somos felices donde estamos? Verás, todos quieren un cambio, pero nadie está dispuesto a cambiar… todos tienen hambre espiritual, pero nadie está dispuesto a hacer el trabajo para ser alimentado. ¿Dónde está la gente dispuesta a levantarse y literalmente pararse en las calles de Jerusalén; no como turistas mirando la historia antigua, sino más bien como hijos de un Rey, que ven la redención escondida justo debajo de la superficie? ¡Debemos aprender a amar la ciudad de nuestro Padre, porque si es Su hogar, entonces también es el nuestro! Así que venid a Jerusalén, porque es, como dice el Salmo 48, “el gozo de toda la tierra [y] la ciudad del gran Rey”.
Padre, lamentamos nuestro desprecio por el lugar al que deseas mostrar favor, Jerusalén. Nunca hemos pensado en Jerusalén como el gozo de toda la tierra; de hecho, los medios de comunicación y la televisión nos muestran todo lo contrario de la alegría. En lugar de alegría, vemos terrorismo, peligros y muchas otras razones por las que deberíamos alejarnos de esta ciudad. Perdónanos por ver las cosas a través de los ojos del mundo y sus opiniones; realmente queremos ver a Jerusalén convertirse en un lugar de salvación y alabanza para el mundo entero. Déjanos ver Jerusalén a través de Tus ojos. Seamos esos siervos que aman las piedras de Jerusalén y mostramos favor a su polvo. Jerusalén es mucho más que una imagen hermosa en un calendario, o un lugar para hacer trueques por bienes baratos; será tu hogar mi Rey Yeshúa! Ayúdanos a verlo como nuestro hogar también… Así que decimos: “Oh Adonái Yeshúa, ahora es el momento, no mañana, ni en una semana, ni en un mes, ni en un año, sino ahora, ahora es el momento para favorecer a Sión”. !” En el nombre de Yeshúa oramos, Amén.
Oración # 15
Mal-Malakí 3:16
[16]Entonces aquellos que temen a Elohím hablaron, todos a su prójimo, y Elohím puso cuidado y escuchó. Un libro de memorias fue escrito en su presencia para aquellos que temen a Adonái יהוה y reverencian Su Nombre.
Ahora que nos hemos arrepentido y nos hemos dado cuenta de nuestro papel dentro de este proceso final de restauración, podemos centrarnos durante las últimas oraciones en la renovación de la relación. Después de 2000 años de odio e incomprensión, primero debemos lidiar con las cosas que nos han impedido tener una relación de bendición.
Pero, antes de que podamos siquiera pensar en comenzar una nueva relación, debemos lidiar con el mayor obstáculo en su camino: el orgullo.
El orgullo debe ser reemplazado por la humildad; esta es la única forma de insuflar nueva vida a esta delicada relación. Es por eso que elegímos el verso anterior de Malaquías 3, donde leemos:
“Entonces los que temían a Adonái hablaron entre sí…” ¿Sabes cuánto tiempo ha pasado desde que los judíos y los cristianos realmente hablaron entre sí en relación significativa? Sin duda, no hemos hablado durante los últimos 2 milenios, ¡pero hablar entre nosotros es un milagro total que podemos presenciar y experimentar hoy! Hay algo que leemos en la historia de José que es muy interesante. En Génesis 37 leemos que los hermanos de José “lo odiaban y no podían hablarle pacíficamente”. Cuando los hermanos se reúnen en Génesis 45, leemos que una vez que los celos, la amargura y la ira desaparecieron, “[José] besó a todos sus hermanos y lloró por ellos… después de que sus hermanos hablaron con él”. Hay algo especial en poder hablar unos con otros. Cuando los hermanos de José “no pudieron hablarle pacíficamente”, la relación se rompió. Eventualmente esto llevó a que José fuera vendido como esclavo por sus hermanos. Pero cuando la relación se reparó, pudieron volver a hablar entre ellos. Sorprendentemente, el profeta Malaquías señala que cuando el pueblo de Elohím se habla entre sí, de repente, “Adonai escuchó y los oyó…” Cuando comenzamos a hablar en un diálogo significativo con nuestros compañeros temerosos de Elohím, el pueblo judío, eso es cuando Elohím escucha y oye. Entonces, comencemos a hablar con nuestros hermanos y hermanas judíos. ¡Esto no es para cambiarlos, sino para amarlos, y que Elohím escuche y se complazca con el sonido de Sus hijos reunidos y hablando una vez más!
Padre, recordamos las palabras del libro de Santiago que dicen: “Humillaos delante de Adonai, y él os dará vida”. Padre, queremos volver a entrar en una relación adecuada como pueblo judío, como pueblo de Mashíaj. Ayúdanos a aprender a ser siervos humildes, así como Yeshúa, nuestro maestro, fue el mayor de los siervos durante su tiempo aquí en la tierra.
Permítenos eliminar verdaderamente la arrogancia y las actitudes que han mantenido separados a judíos y cristianos durante tantos años, y reemplazarlos con corazones que deseen una relación. Gracias por permitirnos vivir en un tiempo en que el diálogo y la conversación están realmente comenzando a tener lugar. Ayúdanos a dejar de hablarle a la gente y en su lugar aprender a hablarle a la gente. Es asombroso pensar que, cuando hablamos y caminamos juntos en unidad, Tú escuchas y grabas esas conversaciones. Atesoras y amas cuando Tus hijos se llevan bien entre sí. Que nuestra comunicación entre nosotros sea un dulce sonido para Tus oídos; a medida que aprendemos, como dice en Santiago 1, “…ser prontos para oír, tardos para hablar, [y] tardos para la ira…” En el nombre de Yeshúa oramos estas cosas, Amén.
Oración # 16
2 Co-Korintyim ב 5:18-19
[18]Y todo es de Adonái יהוה, quien por medio del Mashíaj מָשִׁיחַ nos ha reconciliado con El, y nos ha dado la obra de esta reconciliación;
[19]la cual es que Adonái יהוה en el Mashíaj מָשִׁיחַ estaba reconciliando la humanidad a El, sin tomar en cuenta a los hombres sus pecados, y nos ha confiado el mensaje de la reconciliación.
Nosotros como creyentes en Yeshúa hemos sido comisionados (según Shaul en los versos anteriores) con el ministerio de la reconciliación, reconciliar a Judios y Cristinaos en Yeshúa. Ahora, el contexto usado aquí está relacionado con la reconciliación del mundo con Elohím en Mashíaj. Pero, ¿cómo podemos comenzar el viaje de reconciliar al mundo con Elohím, si no estamos reconciliados unos con otros? Parte de la conexión caótica que hay entre judíos y cristianos, viene del hecho de que, aparte de la relación y el amor, tratamos durante tantos años de “reconciliarlos con Elohím”, sin estar reconciliados entre nosotros mismos. Ahora que finalmente nos acercamos en humildad y estamos deseosos de relacionarnos, las falsedades y mentiras que hemos pensado el uno del otro pueden caer en el camino, porque mientras hablamos, realmente nos damos cuenta de cuánto deseamos lo mismo— ¡ver el mundo entero reconciliado con el Elohím del universo! Si deseamos ver a las personas reconciliarse con Elohím, entonces debemos trabajar para reconciliarnos unos con otros. Me sorprende ver a hombres y mujeres que tienen sus propias familias disfuncionales tratando de reconciliar a los demás. Si la obra de Elohím no es evidente en el propio hogar, ¿cómo puede la gente pretender estar llevándola a alguien o a cualquier otro lugar? ¡Así que cada uno de nosotros ahora tomemos en serio esta comisión de reconciliación, mientras buscamos, junto con nuestros hermanos y hermanas judíos y cristianos, ver al mundo reconciliado con Elohím!
Padre, perdónanos por pensar que podemos reconciliar el mundo contigo, mientras permitimos que nuestras propias relaciones permanezcan en la desesperación y el deterioro. Reconocemos que cada relación reparada es un milagro de Ti, y te pedimos que nos permitas comenzar a sanar nuestra relación con el pueblo judío y los cristianos. Envía Tu Espíritu de reconciliación, para que juntos podamos trabajar para ver al mundo reconciliado Contigo, el Elohím de Abraham, Isaac e Israel. Mostrar al mundo a través de nosotros, cómo es caminar en la reconciliación y el perdón. Y cuando el mundo vea que es posible caminar juntos como hermanos, incluso después del terrible pasado de las relaciones entre judíos y cristianos, quizás entonces el resto del mundo podrá ver un camino más allá de todos nuestros problemas actuales de odio y falta de perdón.
¡Que esta sea Tu voluntad y que pronto la veamos en nuestro tiempo! ¡Amén y Amén!
Oración # 17
Is-Ieshaiah 40:1-2
[1]”Consuela, consuela a mi pueblo,” dice Adonái יהוה.
[2]”Hablen tiernemente ustedes kohanim al corazón de Ierushalaim יְרוּשָׁלַיִם, y declarenle su tiempo de humillación ha terminado, que su iniquidad está expiada, porque ha recibido de la mano de Adonái יהוה el doble por todos sus pecados.”
Encontramos en el profeta Isaías un mandato para que hablemos de consuelo al pueblo y la ciudad de Elohím. Podemos orar por Sión, pidiéndole a Elohím que envíe Su consuelo y paz a Su pueblo y ciudad, pero ¿qué estamos haciendo en la práctica para traer consuelo a Israel? Leemos en Isaías 51, que Elohím ha prometido que “[Él] consolará a Sión, consolará todas sus soledades; El hará su desierto como Edén, y su soledad como huerto de Adonái; En él se hallará gozo y alegría, acción de gracias y voces de melodía”.
Pero, ¿y si podemos comenzar este proceso de consolar a Sión? Oramos por sanidad, pero no digamos que hicimos el trabajo. Plantamos comunidades, pero no pretendamos que lo hicimos por nuestra propia fuerza. Alimentamos a los sin techo, pero todo en nombre de Elohím. Sin embargo, cuando se trata de Sion, ¿esperamos lo milagroso? ¡No! El desierto que se convierte en el Edén de Elohím requiere un trabajo literal. El gozo y la alegría, la acción de gracias y la melodía no aparecen solo cuando los ángeles comienzan a cantar. Más bien, el pueblo de Elohím, que toma a Elohím en Su palabra y comienza a implementarla, es lo que da vida a estas profecías. No afirmamos que podemos lograr lo que solo Elohím puede lograr, pero sí afirmamos que podemos comenzar la obra sabiendo que Elohím, el Maestro constructor, terminará la obra en nosotros y en este mundo. Entonces, cuando la Biblia nos dice que hablemos de consuelo sobre Jerusalén y su gente, despierte a la realidad de que hay personas literales y una Jerusalén literal que nos necesita como creyentes para hablar de descanso, consuelo y vida. Cuando nosotros, los creyentes en El Mesias Judío, despertemos a nuestro llamado como Consoladores de Jerusalén y del pueblo de Israel y comencemos a ponerlo en práctica, esto será lo que dará comienzo a un empoderamiento de consolación final por parte del Elohím que “¡Enjugará toda lágrima de [todos nuestros] ojos!”
Elohím, te agradecemos mucho por Tu consuelo, como dice en:
2 Co-Korintyim ב 1:3-4
[3]Alabado sea Elohím Padre, Padre de Nuestro Adón Yeshúa יֵשׁוּעַ HaMashíaj, Padre compasivo, Elohím de todo aliento y consuelo;
[4]el cual nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que podamos consolar a otros en cualquier tribulación por la cual estén pasando, con el aliento que nosotros mismos recibimos de Adonái יהוה.
El consuelo que hemos recibido de Ti no es solo para nosotros, sino que es algo que debemos compartir con quienes nos rodean. ¡Padre, haznos consoladores de Tu pueblo Israel y de Tu ciudad Jerusalén! Abre puertas que nos permitan brindar consuelo de una manera práctica, para que un día cercano podamos verdaderamente decirle a Sión que “su guerra ha terminado”. Han estado luchando por tanto tiempo, envía Tu Espíritu de Consuelo y Descanso, a través de nosotros los creyentes Judio Mesianicos, para que podamos ser una bendición para Tu pueblo Israel y los cristianos; Y que sepan que ya no están solos. También queremos verte, oh Adonái, consolar a Sion y traer la redención final. ¡Ese momento en que toda la Tierra de Israel se convierta en el jardín de Elohím, donde podamos caminar contigo nuevamente, tal como era al comienzo de la creación! En el nombre de Yeshúa oramos, Amén.
Oración # 18
Is-Ieshaiah 61:4-5
[4]Ellos reconstruirán las ruinas antiguas, restaurarán lugares destruidos hace tiempo; renovarán las ciudades desiertas, destruidas hace muchas generaciones.
[5]Extranjeros apacentarán los rebaños, extranjeros ararán la tierra y cuidarán las vides;
Hoy, vivimos en una temporada de reconstrucción, ya sea en la tierra de Israel misma, o en las relaciones que vemos entre cristianos y judíos. Podemos ver el proceso de reconstrucción que tiene lugar ante nuestros propios ojos. Como leemos en los versos de Isaías arriba, “reconstruirán las ruinas antiguas”.
Esto significa que hay cosas viejas que se están reconstruyendo, como relaciones que han permanecido inactivas durante muchos años. El siguiente verso de Isaías dice algo muy sorprendente.
“Y extraños…Extranjeros” Una vez que comienza el proceso de reconstrucción de las antiguas ruinas, los extraños llegan a la escena. ¿Quiénes son estos Extranjeros? Quizás son los creyentes los que llevan tanto tiempo caminando paralelos pero nunca junto al pueblo judío. De repente, cuando lo antiguo se encuentra con el presente, judíos y creyentes pueden venir y finalmente reconstruir juntos. Según estos versos el extranjero no viene a predicar ni a evangelizar.
Más bien, el extranjero viene a ser una bendición para la nación y el pueblo de Israel. Así es como se construyen las verdaderas relaciones, por el servicio y el amor, sin otra agenda que restaurar lo que se ha roto por demasiado tiempo. Así que ven y únete; ¡Ven a servir y sé una bendición mientras caminamos en la hermosa obra de restauración de la relación que Elohím está haciendo en nuestro tiempo!
¡Gracias Elohím por las antiguas profecías que estás cumpliendo en nuestros días! Es asombroso ver y también ser parte de ello. Ayúdanos a aprender cómo ser una bendición para Tu pueblo. Saca la agenda de los corazones de la cristiandad y reemplázala con un amor genuino y un deseo de conocer mejor a Tu pueblo. Gracias porque nos hemos aferrado a Tus promesas y como de Israel estámos actuando de acuerdo con ellas; muéstranos cómo podemos participar y servir mejor en el trabajo que se está llevando a cabo en nuestro tiempo. ¡Gracias porque los extranjeros tienen un lugar en Tu reino y casa! Enséñanos a ser siervos de todos los hombres, especialmente de la nación de Israel, así como Yeshúa, nuestro maestro vino “para servir y no para ser servido”.
Danos corazones de servicio y así reconstruir las relaciones que se han roto, y sanar las heridas que aún continúan hasta el día de hoy. Queremos ser “Am Ejad, Hashem Ejad—¡Un Pueblo [con] Un Elohím!” Que así sea, en el nombre de Yeshúa oramos, Amén.
Oración # 19
Is-Ieshaiah 2:2-3
[2]En el ajarit-hayamim el Monte de la casa de Adonái יהוה será establecido como el monte más glorioso. Será considerado más exaltado que los otros montes, y los Goyim correrán allá.
[3]Muchas naciones irán, y dirán, “¡Vengan, subamos al Monte de Adonái יהוה, y a la casa del Adonái יהוה de Iaakov יַעֲקֹב! El nos enseñará sus caminos, y nosotros caminaremos en sus sendas.” Porque de Tziyon saldrá la Toráh, la palabra de Adonái יהוה de Ierushalaim יְרוּשָׁלַיִם.
Estamos viviendo en los últimos días, y como tal, debemos estar invitando a las naciones a subir a Jerusalén, la Ciudad Santa. La Casa de Elohím, el cuerpo de Mashíaj, aún no ha sido establecido plenamente; esto significa que tenemos mucho trabajo por delante para prepararnos para el momento en que las naciones lleguen a Jerusalén. Pero podemos comenzar dando la invitación a aquellos de las naciones para que vengan y experimenten Jerusalén como es hoy. Cuando la gente de las naciones comience a acudir en masa a Jerusalén, mostrando su amor por la ciudad de Elohím, entonces no solo Elohím tomará nota, ¡sino también el resto del mundo!
Cuando el turismo a Israel explote a gran escala, todo porque la gente quiere estar en la ciudad del gran Rey, ¡entonces el mundo se dará cuenta! Necesitamos un movimiento de base de personas que se digan unos a otros: “¡Venid, subamos!”. Necesitamos que Jerusalén se convierta en alabanza en toda la tierra. ¡Necesitamos que la palabra de Adonái salga de Jerusalén, y necesitamos a Yeshúa el Elohím de Jacob en Jerusalén para que Él pueda enseñarnos Sus caminos! ¿Creemos seriamente que podemos tomar un atajo hacia la redención? ¡La respuesta es no! Entonces, debemos invitar a nuestros amigos y familiares a Jerusalén, porque como dice Isaías, “…a ella correrán todas las naciones…” ¡Hagamos realidad esta palabra profética! ¡Busca a Adonái, no solo “mientras pueda ser hallado…” sino también en el lugar donde Él dijo que podía ser hallado!
¡Preparemos nuestro corazón y el corazón de las naciones para subir a Jerusalén! Y cuando lleguemos, juntos, como judíos y exgentiles, pidamos la bendición y la presencia de Elohím. Él es lo que finalmente necesitamos para irradiar desde esa ciudad santa, “¡porque [en ese día, finalmente] Él nos enseñará Sus caminos!”
Elohím, haznos voces de shofar que llamen al mundo que nos rodea: “¡Venid y subamos al monte de Adonái!” Te queremos y te necesitamos gobernando desde Jerusalén. Perdónanos por correr a todos los demás lugares excepto al mismo lugar donde dijiste que podías encontrarte. Queremos prepararnos para darte la bienvenida de regreso al mismo lugar donde dijiste que tu presencia habitaría para siempre. ¡Y no queremos ser los únicos esperándote! Que nuestras voces llamen a las naciones a venir y humillarse. A medida que más personas comiencen a darse cuenta de la importancia de Tu ciudad, no solo como un sitio histórico, sino como un lugar para hacer historia futura, ¡permítenos encontrarte a Ti y a Tu presencia allí! ¡Oremos por la paz de Jerusalén, El Principe de Paz!
¡Gracias porque estás edificando a Jerusalén en nuestro tiempo! En el nombre de Yeshúa oramos, Amén.
Oración # 20
Zac-Zejariáh 8:20-23
[20]”Adonái יהוה HaElyon dice: ‘En el futuro, muchos pueblos vendrán y habitantes de muchas ciudades;
[21]los habitantes de cinco ciudades se reunirán en una ciudad, y dirán: Tenemos que ir a hacer súplica a Elohím y a buscar el rostro de Adonái יהוה HaElyon. Yo también iré.'”
[22]Sí, muchos pueblos y naciones poderosas vendrán de todo corazón a buscar el rostro de Adonái יהוה HaElyon en Ierushalaim יְרוּשָׁלַיִם y a implorar el favor de Adonái יהוה.
[23]Elohím אֱלֹהִים HaElyon dice: ‘En aquellos días diez hombres de todas las lenguas de las naciones tomarán (los tzitziyot) del manto de un Yehudí (Yeshúa), diciendo: Iremos contigo, porque hemos oído que Elohím אֱלֹהִים está contigo.’ Mt 9:20-21, 14:34-36, Mc 5:25-27, 6:55-56, Lc 8:43-44, Jn 3:2
Arriba leemos uno de los pasajes más grandes sobre el venidero y pronto avivamiento de las naciones. Pero como se ha dicho antes, se necesita nuestra participación para hacer avanzar estas profecías. Muchos círculos cristianos hablan de ideas como “caminar en lo profético”. Sin embargo, cuando se trata de Israel, el avivamiento venidero más profetizado en todas las Escrituras, los cristianos generalmente no saben casi nada. Cuando miramos los versos anteriores, debemos preguntarnos, “¿dónde están los habitantes de muchas ciudades” que quieren “buscar a Adonái de los ejércitos en Jerusalén?” Es un hermoso pensamiento que llegará el día en que incluso las “naciones fuertes” buscarán a Elohím en Jerusalén para orar ante Él. Pero, como dice en el libro de Romanos, “¿Cómo oirán sin un predicador?” ¿Quién está diciendo actualmente a las naciones que busquen a Adonái de los Ejércitos en Jerusalén? ¿Qué iglesia le está diciendo a su pueblo que vaya a la tierra de Israel para buscar a Elohím? Hay un gran muro de piedra frente al edificio de las Naciones Unidas en Nueva York que tiene un verso hermoso pero bastante utópico del profeta Isaías cincelado en piedra. Dice: “No alzará espada nación contra nación, ni se adiestrarán más para la guerra”. La ONU cree que está haciendo todo lo posible para que estas palabras se cumplan, pero no pueden cambiar los corazones de los hombres. Entonces, si realmente queremos ver paz en nuestro tiempo, entonces, ¿qué tal si seguimos el camino de Elohím… animar a las naciones del mundo a buscar a Adonái de los Ejércitos en Jerusalén? Mejor aún, ¿qué tal si las naciones del mundo agarran al pueblo judío creyente en Yeshúa y dicen: “Vamos contigo, porque hemos oído que Elohím está contigo”. ¡Para que juntos, todo ojo vea y esté listo cuando Elohím aparezca en la Ciudad Santa, en Su gloria! Si esto es lo que quieres, ¡entonces comienza a hacer de Jerusalén, el pueblo judío y el destino de la nación de Israel tu prioridad en tu vida! ¡Buscad a Adonái en Jerusalén!
Gracias Elohím por este plan de avivamiento y redención que has establecido claramente para nosotros en el libro de Zacarías. Ayúdanos, como pueblo de Israel (y cristianos) de las naciones, a emocionar a los que nos rodean a buscarte en Jerusalén. Creemos que la visión de Isaías, donde cada nación depone sus armas, no es solo un sueño fantastico, sino una realidad futura. Padre, te pedimos que hagas volver los corazones de los hombres hacia Ti. Que se den cuenta de la vanidad vacía de su maldad e inmoralidad y, en cambio, deseen verdaderamente Tu camino. Gracias por la nación judía y por tu remanente creyente. Gracias porque son reconocidos como apartados para Ti. Que los pueblos se unan a nosotros y digan: “Vamos con vosotros, porque hemos oído que Elohím está con vosotros”. Y a medida que el pueblo judío escuche estas palabras de las naciones, que revivan al gran propósito para el que los tienes: ¡ser una luz para las naciones! Gracias porque nosotros, como judios creyentes, podemos estar al frente de lo que estás haciendo en el mundo hoy; ¡Ayúdanos, junto con nuestros hermanos y hermanas judíos y cristianos celosos por Tí, a despertar a las naciones para que te busquen en Tu ciudad santa! ¡Amén!
Oración # 21
Sal-Tehilim 22:27-28
[27]Todos los confines del mundo recordarán y se volverán a Adonái יהוה; todas las familias de las naciones adorarán delante de Su presencia.
[28]Porque el Reino pertenece a Adonái יהוה, y Él es el Soberano de las naciones.
En última instancia, la restauración de las relaciones judías y cristianas es solo el comienzo de lo que queremos que suceda en todo el mundo. La unión de judíos y cristianos, como un solo pueblo, para invitar a las naciones del mundo a buscar a Elohím en Jerusalén ciertamente cambiaría el mundo entero. Juntos, podríamos tener la voz más fuerte a favor de la verdad, en comparación con cualquier otro grupo o afiliación religiosa. Si 2.600 millones de cristianos y 15,3 millones de judíos nos unieramos para invitar a las naciones a venir y adorar a Elohím en Jerusalén, créanme, las naciones responderían; y sabemos que eventualmente lo harán, porque como leemos en los Salmos anteriores, las naciones “vendrán y adorarán…” Esto trae a la mente dos preguntas.
En primer lugar, ¿es posible que judíos y creyentes nos unamos para que esto suceda?
En segundo lugar, ¿es este el momento en que estas cosas podrían suceder? Creo que puedo responder a estas dos preguntas con una sola respuesta: ¡sí! Es posible que creyentes y judíos nos unamos, en Yeshúa. ¡Vivimos en un momento en que está sucediendo ante nuestros ojos! Si creyentes y judíos podemos unirnos para hacer brillar la luz de Elohím en este mundo, entonces absolutamente, es el momento de que las naciones suban a Jerusalén. Mis queridos amigos y hermanos, en las palabras del sheliaj Shaul, “¡nuestra salvación está más cerca [ahora] que cuando creímos por primera vez!” Vivimos en los tiempos que soñaron los Profetas. Estos son los tiempos que anhelaban los discípulos de Yeshúa. Estamos tan cerca y, sin embargo, tenemos mucho trabajo por delante. Asi concluye nuestro viaje a través de estas oraciones, pero solo comienza nuestro viaje hacia un futuro más grande, más brillante y mejor cuando todas las naciones, judíos y gentiles, nos reunamos en Mashíaj en Jerusalén para adorar al Elohím que nos ha redimido a todos! ¡Que sea pronto y en nuestros días!
Gracias Rey Yeshúa porque Tu plan final es ver a todas las naciones reunidas en Jerusalén para adorar ante Ti y solo ante Ti. Ayúdanos a estar y permanecer inspirados para llevar este mensaje de redención hasta los confines de la tierra. ¡Las naciones necesitan saber hacia dónde deben mirar y venir para encontrarse contigo!
Gracias por todo lo que hemos podido aprender al leer las Escrituras durante este día.
Que sigas abriendo nuestros ojos a las “maravillas” de Tus Escrituras. Ayúdanos a no perder nunca de vista la visión futura que hemos recibido: verte sentado en tu trono en Jerusalén. Aleja de nosotros el desánimo, mientras buscamos despertar a quienes nos rodean que necesitan escuchar el mensaje de salvación que sale de Jerusalén. Te pedimos que construyas los muros de Jerusalén, traigas paz dentro de ella y la establezcas para que sea una alabanza en toda la tierra. ¡Te necesitamos, oh Adonai Yeshúa, en el trono en Jerusalén!
¡Por favor escucha nuestros gritos! Si Elohím quiere, permíteme pronto caminar por esas calles literales de Sion; porque Tus siervos, ahora que entendemos la importancia de Jerusalén, “se complacerán en sus piedras y mostrarán favor a su polvo”. Todas estas cosas te pedimos y oramos, en el nombre de Nuestro Rey y Salvador Yeshúa, Amén.
Agradecimientos
a Adonái de los ejércitos
¡Quien dirige nuestros caminos, nos da fuerzas y hace prosperar la obra de nuestras manos!
Elohím está haciendo algo hermoso al restaurar a Su Pueblo, ¡y estamos llamados a unirnos a su Pueblo Israel!
Lo invitamos a unirse a nosotros el pueblo judío mesianico con humildad y apoyar nuestro llamado a ser una luz para las naciones.
Nuestro mensaje es el de aquellos que hablan al Pueblo Judío en la conclusión de Zacarías 8:
Zac-Zejariáh 8:23
[23]Elohím אֱלֹהִים HaElyon dice: ‘En aquellos días diez hombres de todas las lenguas de las naciones tomarán (los tzitziyot) del manto de un Yehudí (Yeshúa), diciendo: Iremos contigo, porque hemos oído que Elohím אֱלֹהִים está contigo.’ Mt 9:20-21, 14:34-36, Mc 5:25-27, 6:55-56, Lc 8:43-44, Jn 3:2
¿Subirás a Sión con nosotros? ¡Estamos llamando a las Naciones a mirar y ver lo que Elohím está haciendo en Israel y ser parte de ello!
BIBLIA TORA VIVIENTE
Messianic Jewish Ministry
t.me/menutorahviviente