
SEAN FUERTES Y VALEROSOS, AQUÍ ESTÁ TU ADONÁI יהוה.
Uno de los capítulos más queridos de Isaías es el capítulo 35.
Esto es lo que dice:
Is-Ieshaiah 35:3-4
[3]Fortalezcan sus brazos caídos, y afirmen las rodillas tambaleantes.
[4]Digan a los de corazón apocado: “¡Sean fuertes y valerosos! Aquí está tu Adonái יהוה; El vendrá con venganza; con la retribución de Adonái יהוה El vendrá y los salvará.”
Es una promesa para todos los hijos de Elohím en todo el mundo, que están orando para que el enemigo sea derrotado una vez mas. Aunque siguen sonando amenazas y todavía ocurren ataques, y parece que esta oscuridad simplemente no va a retroceder, Elohím dice claramente:
Is-Ieshaiah 35:3-4
[3]Fortalezcan sus brazos caídos, y afirmen las rodillas tambaleantes.
[4]Digan a los de corazón apocado: “¡Sean fuertes y valerosos! Aquí está tu Adonái יהוה; El vendrá con venganza; con la retribución de Adonái יהוה El vendrá y los salvará.”
¿Dónde? ¿Dónde está ese “aquí”? ¡Cerca! Si te parecía que Él está lejos, entonces está cerca, está cerca. ¡Él está cerca de quienes lo buscan y siempre recompensa a quienes lo invocan! Aquí está tu Elohím Emanuel. La venganza es de Él. No te vengarás, amado. La venganza viene de Elohím.
Is-Ieshaiah 35:5
[5]Entonces los ojos de los ciegos serán abiertos, y los oídos de los sordos serán destapados;
Habla de la vista y el oído físicos, así como de los espirituales. Para muchos de aquellos que están espiritualmente ciegos y no escuchan ni la Palabra de Elohím ni la voz del Ruaj HaKodesh, cuando aparezca la venganza de Adonái y se revele Su retribución, sus ojos espirituales se abrirán y el resplandor de la gloria de Elohím brillará, convirtiendose para ellos en una realidad que sobrepasa toda realidad a su alrededor. Y entonces percibirán a Elohím, y luego sus oídos serán abiertos y oirán la verdadera Palabra de Elohím, a Yeshúa. Porque está vivo y activo para quien se abre a Él y le cree, y le acepta como la palabra viviente y directa de la boca del Elohím.
Por eso, hermanos, no desmayen si testifican, hablan, comparten, oran, y hasta ahora parece no haber respuesta, y aquellos a quienes mostráron pruebas de la gloria de Elohím, con quienes compartieron, dijeron: “Sí”. , sí … Pero ahora está pasando esto, y no entiendo dónde está Elohím.
Sí, oré, leí “Padre Nuestro” y “Rey Nuestro”.
Sí, sí… Pero ahora estoy con estos problemas.
Luego, que mas…”
No te avergüences, no tengas miedo, no te sorprendas. Elohím sabe cuándo derrumbar estos muros sordos que no dejan oír. Él sabe cómo hacerlo. Y Él vendrá y mostrará Su gloria.
Is-Ieshaiah 35:6
[6]entonces el hombre lisiado saltará como un ciervo la lengua de la persona muda cantará. Pues en el desierto, brotarán manantiales, arroyos de agua en el Aravah;
Hermanos, digan lo que digan, no debemos escondernos de la realidad, porque en el sentido espiritual, después de todo, nuestros países no eran el jardín floreciente de Elohím, que daba abundantes frutos. Y esas pruebas que nos han tocado como pueblo, de alguna manera son utilizadas por Elohím para abrir manantiales en el desierto y arroyos en la estepa. Y cuando eso suceda, y no ha sucedido todavía, pero está empezando a suceder, entonces el cojo saltará como un ciervo.
Ver a un cojo caminar y luego correr. Es una señal de lo que Elohím quiere hacer a gran escala y con muchos creyentes que cojean de ambas rodillas – a veces caían sobre el pie que está en el mundo, luego intentaban establecerse sobre el pie que está en el reino de Elohím, y todo el tiempo, los pobrecitos, se tambalean.
Pero cuando el esplendor de la presencia de Elohím se manifieste, cuando los arroyos se abran paso, cuando se abran los ojos de los ciegos, cuando se abran los oídos de los sordos, entonces aquellos que vacilaron constantemente y no pudieron establecerse en el Reino de Elohím y mantenerse firmes definitivamente, firmemente sobre ambos pies sobre la roca que es Yeshúa, finalmente recibirán el poder elevador de Elohím. Y fuera de su parálisis o semiparálisis, finalmente serán levantados por esta fuerza elevadora, saltarán y correrán como los siervos de Elohím, correrán tras Yeshúa. ¡Él Es real!
Cuando esto sucede, todos tienen la opción de en qué centrarse: en lo que sucede a su alrededor, o en lo que Elohím está haciendo, en lo que el enemigo está tratando de distraerlo, cautivarlo e intimidarlo, o en lo que Elohím está haciendo entre todas estas circunstancias, demostrando que Él es el Rey único, eterno, grande y omnipotente.
Bendito nuestro Adonái Yeshúa, El Elohím Viviente, El Elohím de Israel, El Elohím Uno, El Ejad.